Los -ISMOS (racismo, machismo, feminismo, capacitismo…) son una forma de pensar y de actuar en relación a grupos de personas que reunen y comparten unas características comunes.
En el caso del capacitismo es pensar que una persona es mejor, o más valiosa, por reunir una serie de capacidades en comparación implícita con quien, supuestamente, no las tiene. Pues bien, todas estas formas de pensar pueden servir para crear o para destruir. Y tú eliges.
Cuando se considera que unas características son peores o inferiores y que otras son mejores, es el caso de los supremacismos, que es creer que eres mejor por reunir unas características determinadas. Por lo tanto, la violencia va de poder.
Los supremacismos actúan a través de formas de presión y violencia hacia sus víctimas, ejercidas de diversas formas y en diferente intensidad. Porque la violencia, a pesar de tener muchos rostros, parte de un elemento troncal y común:
por un lado, el rechazo y el abuso de aquél que es diferente y, por el
otro, el dolor de no ser admitidos por aquellos que se han erigido como
el patrón social ‘válido’ que ejerce el poder supremacista que dicta
cual es la norma social y que la mayoría ha tolerado, ha ocultado y ha
justificado fiel e inconscientemente porque es ‘lo normal’.
En el caso de las personas con diversidad funcional, nos encontramos con actitudes que las desvalorizan, limitando sus oportunidades y negando su pleno potencial. Un ejemplo tácito de ello es la institucionalización, que no sólo no se erradica tal y como incide Naciones Unidas, si no que se perpetúa renovando e invirtiendo en nuevos centros.
El término «capacitismo» fue acuñado en la década de 1970 por activistas del movimiento de vida independiente, que buscaban visibilizar la discriminación que sufrían las personas con discapacidad.
Algunos autores hablan del capacitismo:
- Carole Pateman: «Una forma de opresión que se basa en la idea de que las personas con discapacidad son incapaces de participar plenamente en la sociedad» que se encuentra en el libro «The Sexual Contract» (1988).
- Tom Shakespeare: «Una forma de discriminación que se basa en la idea de que las personas con discapacidad son inferiores a las personas sin discapacidad» citado en su libro “Disability rights and wrongs” (2006).
- Elizabeth Barnes, 2016 “El prejuicio social y el estigma que se dirigen contra las personas con discapacidad por el solo hecho de que lo son”. The Minority Body: A Theory of Disability» (2016).
- Michael Oliver:»una forma de opresión que se basa en la idea de que las personas con discapacidad son incapaces de participar plenamente en la sociedad». “La organización social de la discapacidad” (2019).
- El capacitismo se manifiesta en diferentes ámbitos, incluyendo:
- La cultura: En los medios de comunicación, en la educación y en la publicidad. Por ejemplo, las personas con diversidad funcional suelen ser representadas de manera negativa o estereotipada, lo que contribuye a perpetuar los prejuicios contra ellas.
- La educación: Pueden ser discriminadas en el sistema educativo, ya sea por falta de acceso a la educación, falta de adaptaciones o segregación.
- El empleo: Pueden ser discriminadas en el mercado laboral, ya sea por falta de oportunidades, falta de adaptaciones o prejuicios por parte de los empleadores.
- La atención sanitaria: Pueden ser discriminadas por falta de accesibilidad, falta de recursos o prejuicios por parte de los profesionales sanitarios.
- La vivienda: Pueden ser discriminadas en el mercado inmobiliario, ya sea por falta de accesibilidad o prejuicios por parte de los propietarios.
- El transporte: Pueden ser discriminadas ya sea por falta de accesibilidad o prejuicios por parte de los conductores o pasajeros.
- La accesibilidad: Pueden ser discriminadas en la vida cotidiana debido a las barreras, tanto físicas como comunicativas, cognitivas o sensoriales.
- La participación social: Pueden ser discriminadas y excluidas, ya sea en el ámbito político, cultural o recreativo.
- La violencia: En las personas con diversidad funcional hay una mayor incidencia y prevalencia al abuso, ya sea física, sexual o psicológica.
- Los estereotipos y los prejuicios. Las personas con diversidad funcional a menudo son objeto de ideas preconcebidas que pueden afectar su autoestima y sus oportunidades.
El capacitismo tiene consecuencias negativas para las personas con diversidad funcional. De hecho, las personas con diversidad funcional tienen más probabilidades de:
- o vivir en la indigencia.
- o ser segregadas de la sociedad.
- o enfermar.
- o sufrir agresiones y abusos.
Algunos ejemplos de los artículos publicados sobre capacitismo en los últimos años:
- -«Capacitismo: la forma en que discriminamos a las personas con discapacidad», publicado en el diario El País en 2022. Este artículo explora el concepto de capacitismo y cómo se manifiesta en la sociedad.
- -«Cómo combatir el capacitismo en el lugar de trabajo», publicado en la revista Forbes en 2021. Este artículo ofrece consejos sobre cómo crear un lugar de trabajo más inclusivo para las personas con discapacidad.
- -«El capacitismo en la educación», publicado en la revista Educaweb en 2020. Este artículo analiza cómo el capacitismo puede afectar a la educación de las personas con discapacidad.
- -«El capacitismo en la cultura popular», publicado en el blog de la organización no gubernamental Plena Inclusión en 2019. Este artículo explora cómo el capacitismo se refleja en la cultura popular.
- -«El capacitismo en el lenguaje», publicado en el blog de la organización no gubernamental Down España en 2018. Este artículo analiza cómo el capacitismo se manifiesta en el lenguaje.
La lucha contra el capacitismo requiere de la acción de todos los miembros de la sociedad. Es responsabilidad de cada persona cuestionar sus propias actitudes y creencias. Educarnos sobre las experiencias y perspectivas de las personas con diversidad funcional, y la implementación de medidas concretas, podemos generar un impacto significativo y asegurar que se respeten y protejan los derechos de las personas con diversidad funcional.
La educación inclusiva crea la conciencia necesaria en la lucha contra el capacitismo. Por ello, es esencial garantizar el acceso a una educación inclusiva, que valore y respete las necesidades individuales de las personas.
Enfrentar y erradicar esta discriminación es un compromiso que nos incumbe a toda la ciudadanía. Deberemos trabajar para construir una sociedad que valore la diversidad, promueva la inclusión y garantice los derechos de las personas con diversidad funcional.
Alzamos nuestras voces en defensa de una sociedad en la que cada persona sea valorada por su singularidad y pueda disfrutar de la igualdad de oportunidades y participación en todos los ámbitos de la vida.
Debemos asegurar que se cumplan los derechos fundamentales de las personas con diversidad funcional. Es hora de erradicar esta ignominia y construir una sociedad inclusiva y justa, donde se respeten plenamente los derechos de las personas con diversidad funcional.
Bibliografía:
● Toboso, L. (2016). El capacitismo: Una revisión crítica de los principales conceptos. Revista Española de Sociología, 29(2), 277-294.
● Toboso, L. (2020). La diversidad funcional como enfoque para la inclusión social. Revista Española de Discapacidad, 8(2), 131-148.
● Barnes, E. (2002). The social model of disability: A sociological approach to disability. In L. Barton (Ed.), Disability studies: Past, present and future (pp. 43-60). Oxford: Blackwell.
● Pateman, C. (1988). The sexual contract. Cambridge: Polity Press.
● Oliver, M. (1990). The politics of disablement: A sociological approach. London: Macmillan.
● Shakespeare, T. (2006). Disability rights and wrongs. London: Routledge.
Además, se han utilizado los siguientes recursos:
● Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de la ONU.
● Ley General de Discapacidad de España.
● Modelo social de la discapacidad.
Autoría: Plataforma de afectados por la Ley de dependencia (Paled)
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