Quiero daros la visión de una persona con movilidad reducida y usuario de silla de ruedas electrica,de los impedimentos que encuentro en la vida diaria y de las posibles soluciones. Hay muchísimos puntos de vista, tantos como personas, y yo estoy dispuesto a considerarlos, y respetarlos todos, y si fuese posible llegar a un acuerdo con todos ellos, de forma que todos podamos respetar, normalizar e integrar formas de ver las cosas "con otros ojos".
También decir que no soy ningún experto en urbanismo, ni tan siquiera gran conocedor del tema, pero soy quién sufre (como muchísimos compañeros) los despropósitos de los que sí entienden y se dicen técnicos en urbanismo.
viernes, 25 de diciembre de 2009
sábado, 21 de noviembre de 2009
Guerrero de humo
Andoni Moreno
Me he levantado con la vehemencia del guerrero, dispuesto a dar batalla, a comerme el mundo a dentelladas, estoy eufórico porque tengo la razón, los motivos y el corazón para ello.
Primera batalla: Intentas organizarte con personas con las misma problemáticas para de esta forma tener mas fuerza.
Aunque a muchos les parece bien las asociaciones, no están dispuestos a comprometerse y ayudar, únicamente acuden a ellas cuando tienen problemas puntuales y personales, una vez solucionados, desaparecen.
Hay quién se organiza y todo le parece bien e incluso tiene ideas, pero que el trajo lo hagan otros
Otros a pesar de ir en silla de ruedas no quieren saber nada de otros en su misma situación, ni que les vean juntos, pues ellos no son, ni corresponden a la misma especie.
Hay más que directamente no quieren saber nada, eso no va con ellos, viven en los mundos de Yupi, todo se soluciona de forma esporádica
Luego están las asociaciones profesionalizadas, muchas por ser profesionalizadas ya están prostituidas, solo ven la forma de cumplir expediente, y dejan en el camino la verdadera esencia que la dio origen. “Batalla perdida”
Segunda batalla: Los políticos, nos utilizan para salir bien en las fotos, para decirse a sí mismo lo buenos que son y convencer de ello a los votantes, cuando intentas hacerles ver la problemática y el incumplimiento de las leyes, te remiten a los técnicos y subalternos, y estos a su vez sabiendo que son sus jefes de forma temporal te ningunean de la forma mas despreciativa. Incluso los departamentos que en teoría tendrían que trabajar por estos temas, además de cobrar por ello brillan por su ausencia. “Batalla perdida”.
Lo que no comprendemos es que, en nuestra desunión esta su fuerza, que ya que no nos ven como personas, que nos vean como número (temblad), que apelando a los derechos como personas y a su sensibilidad no conseguimos nada, pues que nos vean como votantes (3.800.000 personas con discapacidad), lo importante es conseguir el objetivo, luego nosotros nos encargaremos de humanizar esos números. “Batalla perdida”
Ha pasado el día, ni un solo triunfo, estoy cansado y de bajón, las ilusiones se esfumaron, ME RINDO
Andoni
http://blogs.periodistadigital.com/sillaruedas.php/2009/11/21/p255917#more255917
Me he levantado con la vehemencia del guerrero, dispuesto a dar batalla, a comerme el mundo a dentelladas, estoy eufórico porque tengo la razón, los motivos y el corazón para ello.
Primera batalla: Intentas organizarte con personas con las misma problemáticas para de esta forma tener mas fuerza.
Aunque a muchos les parece bien las asociaciones, no están dispuestos a comprometerse y ayudar, únicamente acuden a ellas cuando tienen problemas puntuales y personales, una vez solucionados, desaparecen.
Hay quién se organiza y todo le parece bien e incluso tiene ideas, pero que el trajo lo hagan otros
Otros a pesar de ir en silla de ruedas no quieren saber nada de otros en su misma situación, ni que les vean juntos, pues ellos no son, ni corresponden a la misma especie.
Hay más que directamente no quieren saber nada, eso no va con ellos, viven en los mundos de Yupi, todo se soluciona de forma esporádica
Luego están las asociaciones profesionalizadas, muchas por ser profesionalizadas ya están prostituidas, solo ven la forma de cumplir expediente, y dejan en el camino la verdadera esencia que la dio origen. “Batalla perdida”
Segunda batalla: Los políticos, nos utilizan para salir bien en las fotos, para decirse a sí mismo lo buenos que son y convencer de ello a los votantes, cuando intentas hacerles ver la problemática y el incumplimiento de las leyes, te remiten a los técnicos y subalternos, y estos a su vez sabiendo que son sus jefes de forma temporal te ningunean de la forma mas despreciativa. Incluso los departamentos que en teoría tendrían que trabajar por estos temas, además de cobrar por ello brillan por su ausencia. “Batalla perdida”.
Lo que no comprendemos es que, en nuestra desunión esta su fuerza, que ya que no nos ven como personas, que nos vean como número (temblad), que apelando a los derechos como personas y a su sensibilidad no conseguimos nada, pues que nos vean como votantes (3.800.000 personas con discapacidad), lo importante es conseguir el objetivo, luego nosotros nos encargaremos de humanizar esos números. “Batalla perdida”
Ha pasado el día, ni un solo triunfo, estoy cansado y de bajón, las ilusiones se esfumaron, ME RINDO
Andoni
http://blogs.periodistadigital.com/sillaruedas.php/2009/11/21/p255917#more255917
miércoles, 11 de noviembre de 2009
sábado, 24 de octubre de 2009
¡Malas obras!
Andoni Moreno
El otro día me encontré con una noticia que me hizo pensar de una forma mal sana (hay sentimientos que no se pueden controlar).Dicha noticia refería que los comerciantes de Madrid estaban en guerra con el Ayuntamiento a cuenta de las obras que se estaban acometiendo en toda la ciudad de forma simultanea, e instaban a su paralización, por lo menos en temporada de navidad, para no malograr dicha campaña y compensar un poco las perdidas causadas por la crisis.
Veréis, esta situación, pero de forma inversa, la padecemos un gran sector de la población con problemas de movilidad cada vez que salimos a la calle o queremos ir algún establecimiento comercial u hostelero, sin necesidad de obras, y a lo largo de “todos” los años de nuestra vida y no de forma puntual y pasajera.
No me malinterpretéis, no me alegro del mal ajeno, y me solidarizo con los comerciantes y les deseo la mejor de las suertes, lo que digo que estas situaciones se tendrían que dar más a menudo y de forma provisional, para ponerse en la piel de las personas que padecen este tipo de impedimentos. Para que comprendan que la solución de muchos de nuestros males está en manos de la población y gobernantes. Es mas, reivindico que se dejen las calles sin arreglar, con socavones, charcos, auténticos barrizales, con piedras, etc. ¡A que jode! De esta forma estaríamos en “igualdad de condiciones” y aún así lo que para unos sería una contrariedad para otros seguiría siendo una imposibilidad. Esta situación es la que vivimos muchas personas, que pagamos impuestos, que tenemos “leyes que nos amparan” y se incumplen sistemáticamente. Somos una gran mayoría: Personas mayores, padres y madres con carritos de niños, personas discapacitadas provisional o indefinidamente, etc.
Yo abogo por una ciudad para todos
http://blogs.periodistadigital.com/sillaruedas.php/2009/10/24/p252897#more252897
El otro día me encontré con una noticia que me hizo pensar de una forma mal sana (hay sentimientos que no se pueden controlar).Dicha noticia refería que los comerciantes de Madrid estaban en guerra con el Ayuntamiento a cuenta de las obras que se estaban acometiendo en toda la ciudad de forma simultanea, e instaban a su paralización, por lo menos en temporada de navidad, para no malograr dicha campaña y compensar un poco las perdidas causadas por la crisis.
Veréis, esta situación, pero de forma inversa, la padecemos un gran sector de la población con problemas de movilidad cada vez que salimos a la calle o queremos ir algún establecimiento comercial u hostelero, sin necesidad de obras, y a lo largo de “todos” los años de nuestra vida y no de forma puntual y pasajera.
No me malinterpretéis, no me alegro del mal ajeno, y me solidarizo con los comerciantes y les deseo la mejor de las suertes, lo que digo que estas situaciones se tendrían que dar más a menudo y de forma provisional, para ponerse en la piel de las personas que padecen este tipo de impedimentos. Para que comprendan que la solución de muchos de nuestros males está en manos de la población y gobernantes. Es mas, reivindico que se dejen las calles sin arreglar, con socavones, charcos, auténticos barrizales, con piedras, etc. ¡A que jode! De esta forma estaríamos en “igualdad de condiciones” y aún así lo que para unos sería una contrariedad para otros seguiría siendo una imposibilidad. Esta situación es la que vivimos muchas personas, que pagamos impuestos, que tenemos “leyes que nos amparan” y se incumplen sistemáticamente. Somos una gran mayoría: Personas mayores, padres y madres con carritos de niños, personas discapacitadas provisional o indefinidamente, etc.
Yo abogo por una ciudad para todos
http://blogs.periodistadigital.com/sillaruedas.php/2009/10/24/p252897#more252897
sábado, 26 de septiembre de 2009
Rampas, escaleras mecánicas y ascensores
Andoni Moreno
Un preso de la conciencia ajena
Se ha puesto de moda en las ciudades, con una orografía un poco peculiar, el facilitar la vida de sus ciudadanos poniendo rampas, escaleras mecánicas y ascensores. Eso está muy bien, pues cada día hay mas personas mayores y con problemas variados que se benefician de estos artilugios en su vida diaria.
Lo que me indigna es que se dedican grandes partidas de dinero para esto, y luego se escatime en cosas tan simples como el rebajar un escalón.
Si, habéis acertado, soy usuario de silla de ruedas, y mientras me alegro por la comodidad de los demás, sufro la prisión que es para mí (como otros muchos compañeros) un simple escalón. ¿Qué exagero?, por un simple escalón en el portal no se puede salir a la calle, por un
simple escalón no puedo cruzar un paso de peatones, no puedo tomar un café en un bar, comprar ropa o comida, no puedo entrar en establecimientos públicos ni privados, etc., etc... ¡Los que andan en silla saben de lo que hablo!
No se que criterios se utilizan para acometer este tipo de obras, pero me consta que no se prima la calidad humana, pues lo que es para unos una ayuda o accesorio, para otros es un imposible (Un escalón es una cárcel para nosotros).
http://blogs.periodistadigital.com/sillaruedas.php/2009/08/26/rampas-escaleras-mecanicas-y-ascensores
Un preso de la conciencia ajena
Se ha puesto de moda en las ciudades, con una orografía un poco peculiar, el facilitar la vida de sus ciudadanos poniendo rampas, escaleras mecánicas y ascensores. Eso está muy bien, pues cada día hay mas personas mayores y con problemas variados que se benefician de estos artilugios en su vida diaria.
Lo que me indigna es que se dedican grandes partidas de dinero para esto, y luego se escatime en cosas tan simples como el rebajar un escalón.
Si, habéis acertado, soy usuario de silla de ruedas, y mientras me alegro por la comodidad de los demás, sufro la prisión que es para mí (como otros muchos compañeros) un simple escalón. ¿Qué exagero?, por un simple escalón en el portal no se puede salir a la calle, por un
simple escalón no puedo cruzar un paso de peatones, no puedo tomar un café en un bar, comprar ropa o comida, no puedo entrar en establecimientos públicos ni privados, etc., etc... ¡Los que andan en silla saben de lo que hablo!
No se que criterios se utilizan para acometer este tipo de obras, pero me consta que no se prima la calidad humana, pues lo que es para unos una ayuda o accesorio, para otros es un imposible (Un escalón es una cárcel para nosotros).
http://blogs.periodistadigital.com/sillaruedas.php/2009/08/26/rampas-escaleras-mecanicas-y-ascensores
domingo, 20 de septiembre de 2009
¿Comercio justo?
Andoni Moreno
Imaginaos esta escena:
A Lola, la han invitado a merendar, para celebrar el cumpleaños de su sobrino, en una cafetería céntrica de su ciudad. Al llegar a la cafetería se encuentra que hay un gran escalón justo en la entrada, los camareros muy amables se ofrecen a subirla ¿pero cómo se sube una silla de ruedas de 150 Kg. a la que hay que añadir el peso de ella, además de la estrechez de la entrada? Tras innumerables intentos, desisten, pues se hace imposible el agarrar dicha silla.
Lola tuvo que quedarse en la puerta por no desairar a su sobrino, mientras algunos familiares se relevaban y la hacían compañía, y los amables camareros la sacaban el trozo de tarta y refrescos a la puerta.
Pues, no, esta escena, no es de ninguna película, se repite constantemente en nuestras ciudades y en la mayoría de establecimientos comerciales y hosteleros.
A pesar de tener leyes y normativas que se incumplen sistemáticamente por que los funcionarios que tendrían que velar por su cumplimiento (que además cobran por ello) hacen dejadez de sus funciones por amiguismo, por no enfrentarse a las asociaciones de comerciantes. . . etc., etc.
Yo, si fuera comerciante, concienciado, y cumplidor de las leyes, me sentiría ofendido por el agravio comparativo. Tampoco apelo a la sensibilidad de las personas, sino a la profesionalidad como vendedor, viendo potenciales clientes, que este es el fin de su cometido.
Hay un eslogan que reza “POR UN COMERCIO JUSTO” ¿Y la dignidad de las personas qué? Por que tener que comprar desde la puerta no lo considero digno, por muy amable que sea la persona que nos atienda, además yo pago con dinero de curso legal, o acaso pido que el precio del producto sea acorde a la forma de compra, ósea, disminuido de forma brutal, pues yo también soy muy amable.
Vaya por delante que no tengo nada contra los comerciantes, sino contra los que impiden la normalización de mi vida.
Para éstos últimos, daré a mis amigos, familiares y colegas de “indignidades”, unas ideas que queremos poner en práctica en la asociación a la que pertenezco y con la cual colaboro:
-Hacer un listado, actualizable, con los establecimientos comerciales y hosteleros de mi ciudad que son accesibles y ponerlos en Internet y en un boletín trimestral que se buzoneará a nivel local.
-Además de hacer unas pegatinas de plástico transparente con el logo del discapacitado, para poner en la puerta del establecimiento, indicando que el lugar es accesible.
http://blogs.periodistadigital.com/sillaruedas.php/2009/09/20/p249913#more249913
Imaginaos esta escena:
A Lola, la han invitado a merendar, para celebrar el cumpleaños de su sobrino, en una cafetería céntrica de su ciudad. Al llegar a la cafetería se encuentra que hay un gran escalón justo en la entrada, los camareros muy amables se ofrecen a subirla ¿pero cómo se sube una silla de ruedas de 150 Kg. a la que hay que añadir el peso de ella, además de la estrechez de la entrada? Tras innumerables intentos, desisten, pues se hace imposible el agarrar dicha silla.
Lola tuvo que quedarse en la puerta por no desairar a su sobrino, mientras algunos familiares se relevaban y la hacían compañía, y los amables camareros la sacaban el trozo de tarta y refrescos a la puerta.
Pues, no, esta escena, no es de ninguna película, se repite constantemente en nuestras ciudades y en la mayoría de establecimientos comerciales y hosteleros.
A pesar de tener leyes y normativas que se incumplen sistemáticamente por que los funcionarios que tendrían que velar por su cumplimiento (que además cobran por ello) hacen dejadez de sus funciones por amiguismo, por no enfrentarse a las asociaciones de comerciantes. . . etc., etc.
Yo, si fuera comerciante, concienciado, y cumplidor de las leyes, me sentiría ofendido por el agravio comparativo. Tampoco apelo a la sensibilidad de las personas, sino a la profesionalidad como vendedor, viendo potenciales clientes, que este es el fin de su cometido.
Hay un eslogan que reza “POR UN COMERCIO JUSTO” ¿Y la dignidad de las personas qué? Por que tener que comprar desde la puerta no lo considero digno, por muy amable que sea la persona que nos atienda, además yo pago con dinero de curso legal, o acaso pido que el precio del producto sea acorde a la forma de compra, ósea, disminuido de forma brutal, pues yo también soy muy amable.
Vaya por delante que no tengo nada contra los comerciantes, sino contra los que impiden la normalización de mi vida.
Para éstos últimos, daré a mis amigos, familiares y colegas de “indignidades”, unas ideas que queremos poner en práctica en la asociación a la que pertenezco y con la cual colaboro:
-Hacer un listado, actualizable, con los establecimientos comerciales y hosteleros de mi ciudad que son accesibles y ponerlos en Internet y en un boletín trimestral que se buzoneará a nivel local.
-Además de hacer unas pegatinas de plástico transparente con el logo del discapacitado, para poner en la puerta del establecimiento, indicando que el lugar es accesible.
http://blogs.periodistadigital.com/sillaruedas.php/2009/09/20/p249913#more249913
viernes, 11 de septiembre de 2009
Pedro Ikaza, 35 bajo A - Santurtzi
jueves, 10 de septiembre de 2009
Expediente: Gabriel Aresti, 1 Santurtzi (Unidental)
Gran Reforma Integral; Cambio de Actividad Comercial (Antes tienda de congelados)
10 Septiembre de 2009
Abierto con escalon en entrada, elevador de asiento
Imposible para sillas de ruedas eléctricas y complicado para las manuales
11 Abril de 2012
Típico, lo que hacemos lxs que vamos en sillas de
ruedas ¡Subimos andando!
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